BSO: Brindo, de Andrés Calamaro.
Aunque en realidad fue mucho antes, esta aventura comenzó de facto un 9 de febrero en el aeropuerto del Prat de Barcelona. Allí, una vez facturadas las maletas y esperando en la puerta de embarque, sonó el teléfono de Casas por última vez en suelo español. Al otro lado, varios miembros de la Nova Fornada: Xarli, Cabús, Barrulas y Jevi, que habían venido a darnos una sorpresiva despedida.

A los tres primeros tuve el privilegio de encontrarlos en mi periplo colombiano. Al último no me lo encontré en Bolivia por una semana, y pese a no vernos incluso pudimos sentir cercana nuestra mutua presencia.

Y de eso quería hablaros en el post de hoy. De la relación directa entre las despedidas y los encuentros. Alguien dirá que encontrarme a tres de las cuatro últimas personas que vi antes de partir es fruto de la casualidad. Pero como hemos demostrado muchas veces desde esta tribuna, las casualidades no existen. Así que los designios de la Épica, me trajeron el gran placer de compartir viaje con estos señores. Y no sólo con estos, pues otro grande, Lucho de la Epsi también nos acompañó un buen puñado de días.

Si os digo la verdad, lo necesitaba. Necesitaba estar con gente a la que no haya que explicarle nada. Llevo seis meses viajando y he conocido a mucha gente, mucha de ella maravillosa y algunos incluso se han convertido en buenos amigos. Pero, inevitablemente, cualquier conversación con alguien en este tiempo siempre comienza de la misma manera: explicando un poco quien eres, qué estás haciendo y qué te ha llevado hasta esa conversación. Y eso un tiempo está muy bien, pero al final agota un poco. Es siempre empezar de cero una relación y eso es una sensación nueva, satisfactoria, pero quizás un poco fatigante.

Así que ya me venía muy bien encontrar caras conocidas, gente que sabe quien eres, como eres y con la que demasiadas veces, las palabras no son necesarias. Y ahora que, después del encuentro ya nos hemos despedido, estoy recuperado. Estoy ya dispuesto para contarle a todo el mundo cual es mi historia y a buscar dentro de los millones de personas que habitan o viajan por este continente, a los verdaderos amigos de la Épica.
Y hablando de despedidas y de encuentros, mañana mismo me encuentro con otros viejos amigos de la Épica. Pronto descubriréis quien son.

Hasta ese momento, como dice la genial canción que encabeza hoy el post, brindo por las despedidas y brindo sobretodo por los encuentros. Señores, fue un placer viajar con ustedes.
Que bien escribes, chico!
Pach: Nos dejamos de dietas Siken’s y vamos unos meses con Alex?? No nos come el niño!
Desde mi primer día de curro, un abrazo
Unos se despiden y otros se encuentran. Hoy he quedado con Xarli en Bilbao, otro seguidor de la Épica, que va directo de Bogotá a Bilbo a darlo todo con Miki, LLopas y algun rebentao más en la semana Grande. No dudamos que si estuvieras por Barcelona harias una escapadita por tierras vascas a mostrar tu savoir faire…
Un abrazo Alex!!
Despedidas y encuentros, muy interesantes, aquellas un poquito tristes ?, pero los encuentros-reencuentros son maravillosos y sobre todo este, ayer ahí/hoy aquí, tan diferente, distinto, particular, super especial y efectivamente, en él, casi no serán necesarias las palabras, será…»lo más»!!!; en ese pequeño Estado, ECUADOR, frontera entre dos Américas.
Guayaquil, ese primer puerto ecuatoriano ruidoso y colorista puerta abierta en el macro-Océano, será desde ahora, para vosotros, un lugar imborrable, preferente y permanente…para el r e c u e r d o!!!
Besos
Largo ha sido el camino y la espera,
por ello más ansiado el reencuentro´
no podía ser de otra manera,
padres e hijo lo llevan dentro.
La cita será en Guayaquil,
emocionante ,emotiva, afectiva,
digna de glosar por un alguacil.
Besos de la extensa familia Jiménez-Pinto
Muchas gracias por los comentarios. Informo a todos los lectores de este blog, que ya me he juntado con mis señores padres y que estaremos juntos unos cuantos días, ya que han tenido la deferencia de venir a visitarme. Así que vamos a ver a partir de ahora las desventuras de la familia Épica. Vamos con las respuestas:
Alicia… ¡Muchas gracias! y espero que fuera leve ese primer día de curro. Podeis apuntaros a la dieta del cucurucho, que es la mejor.
Jevi, ya lo se ya…. y que envidia me dais! Te diría, dadlo todo en Bilbao, pero me lo ahorro porque se de sobras que lo hareis. Da recuerdos a todos.
Alhambra, pues ese momento ya sucedió, ya estamos juntos.
Adolfo, muy grandes tus poemas, incluso encontrando rima con algo tan dificil de rimar como Guayaquil! Que sigan esas rimas!
Un beso a todos, desde Montañita, en Ecuador.
Sencillo post pero no por ello menos agradecido. Ha estado bien eso que cuentas de tener que contar desde cero tantas veces y lo que se agradece no tener que hacerlo. O como comentabas en el post anterior, de poder «usar palabras inventadas por algún colega y que te entiendan».
Pequeña corrección, la canción es «Salud (Dinero y Amor)», de Los Rodríguez. Pero bueno, todo el mundo llama Hace calor a Mucho mejor, no?
Alex!!! ahora que te has juntado con tus Sres. padres pon alguna foto de los tres que me hace ilu veros juntos. Diles que por casa todo está bien, recogidas las cartas y regados los geranios. Besos gordos a los tres.
Gracias!
Uli, toda la razón en cuanto al título de la canción.
mc, gracias por la info y por los geranios, jeje. Respecto a la foto, ya hay alguna colgada en la galeria del picasa. Y pronto vendrán nuevos posts.
Un beso!